El león desaparecido

22.07.2012 21:58

 

    ¿Qué pasó? Se preguntaban todos aquel 20 de Noviembre de 1788. Lo que había pasado era que ¡Se había escapado el león! Alguien lo había soltado porque el solo no habría sido tan hábil de escaparse de una jaula con vidrios blindados, rejas de acero y otros metales. Los guardias del zoológico no lo podían creer, ellos pensaban que, como estaba con otros leones y leonas, ellos lo habían comido  porque no había ni una sola puerta abierta, las cadenas cerradas y la llave, en el mismo lugar. Al enterarse toda la ciudad, el zoológico se cerró y el intendente advirtió que nadie saliera de sus casas, ni fuera al colegio o al trabajo porque ese león era el más nuevo, el más salvaje, e incluso, el más peligroso.

    Los guardias buscaron e investigaron por todo el zoológico buscando pistas o huellas, pero no encontraron nada, entonces se encerraron en una habitación todos y pensaron y pensaron, hasta que se encontró una solución  entre las conclusiones de todos. El león por más que era  nuevo en el lugar, era muy, muy viejo e incluso tenia una enfermedad muy grave y  estaba por morir. Él, sabiéndolo, cavó un pozo profundo, cuando llegó su momento, le pidió a sus compañeros que lo taparan. Así el león se fue a vivir tranquilo a la otra vida o vida eterna y todo el mundo le hizo una gran despedida, con velas y todo. El león era salvaje y peligroso porque estaba cansado de sufrir.

 

 

 

Autora: María Milagros Palomeque